El vestido de novia es un clásico que las mujeres no podemos renunciar, pero si podemos atrevernos a cambiar el blanco, por un vestido sofisticado en colores vivos o estampados.
Vera Wang fue la primer diseñadora que desafió la tradición y trajo diseños en blanco y negro, rosa y hasta rojo.
Varias actrices se animaron a esta propuesta durante el 2014, como Jessica Biel o Kaley Cuoco
Más allá del color lo que hace al vestido de novia es el diseño y la actitud al llevarlo.
¿Vos te animarías a cambiar las reglas el día de tu boda?
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